La Estrategia de Fortalecimiento Comunitario que se ejecuta gracias a la labor de los 99 Gestores  y Gestoras Comunitarios de la Misión Casa Para Todos del Plan Toda Una Vida continúa arrojando resultados que se visibilizan en el compromiso y la corresponsabilidad de las familias de las urbanizaciones frente a la emergencia sanitaria.

Las mingas de limpieza y desinfección son actividades constantes dentro de las urbanizaciones con el objetivo de evitar el contagio por Covid-19.

En Nuevo Ceibos y Tosagua, las familias se organizaron para desinfectar áreas comunales y fumigar las viviendas. De la misma manera, la comunidad de Chazara realizó una fumigación en calles, parqueaderos y áreas recreativas manteniendo la distancia adecuada entre los participante como medida de precaución.

La solidaridad entre los vecinos y vecinas se sigue manifestando semana a semana. Es así que en Nuevo Rocafuerte se entregó alimentación a las familias más vulnerables. Por su lado, los Gestores Comunitarios  de Huarcay organizaron las raciones del Banco de Alimentos para la entrega de viveres a las 610 familias de la comunidad de Huarcay.

La campaña “Dar una Mano sin dar la Mano” impulsada por El Gobierno De Todos a través del Ministerio de Inclusión Social entregó 80 kits de productos alimenticios a las familias de la urbanización Milagro. De la misma manera, 140 kits fueron recibidos por los vecinos y vecinas de Balcón Encantado en Anconcito y 62 kits en la urbanización Madre Guillermina Gavilanes en Santa Clara, Pastaza.

Los huertos comunitarios son un medio de vida que se impulsan como parte de la Estrategia de Fortalecimiento Comunitario y se han convertido en una herramienta para enfrentar la emergencia sanitaria. En Dulce Amanecer Pujilense se recolectó tomate y pimiento como una iniciativa de las familias para entre los más vulnerables de la comunidad.

Así mismo, las vecinas de San Jacinto de Olmedo elaboran mascarillas para sobrellevar la emergencia sanitaria. En Cristo del Consuelo, Jaramijó Ceibo Renacer y San Alejo, las familias prendieron velas como un acto de fe y esperanza por la paz y tranquilidad del país y del mundo frente a la pandemia por el Covid-19.